viernes, 25 de marzo de 2011

Changes

Vaya mes de marzo que llevo, deberá ser el advenimiento de la primavera. El caso es que estoy de un bajón enorme, no tengo nada. Es curioso como nos acostumbramos a vivir cada día desde la inercia del día anterior, y cuando ésta se acaba y aparecen las rupturas nos sorprende totalmente desarmados. La vida cambia y te cambia a tí y a tu entorno. ¿Cómo estamos de preparados para adaptarnos a ese cambio?. ¿Somos capaces de reinventarnos?. Quizás sea que yo lo vivo así, pero qué indefenso me dejan los cambios drásticos que suceden en mi entorno. El primero fue la muerte de mi padre. Hasta ese momento no era consciente de que ese hecho tenía que llegar, y eso que en el caso de mi padre era evidente, pero no tenía asumido ni en un mínimo grado que eso ocurriría. Y a pesar de que eso ya ocurrió hace casi 10 años, mi capacidad de cambio antes hechos adversos sigue siendo mínima. Cuánta distancia hay entre mi inteligencia cognitiva (si es que la tengo) y la emocional (que es obvio tengo muy poca).